Hace poco tuve el gran honor de participar en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Agua en Nueva York, la primera de este tipo en casi 50 años. Con más de 8.000 asistentes, entre los que se encontraban líderes del agua y del clima, representantes de gobiernos y organizaciones sin ánimo de lucro, me sentí profundamente inspirado por los apasionados profesionales que me rodeaban para impulsar la acción por el agua. Venir desde Singapur para hablar en el acontecimiento mundial más importante sobre el agua desde 1977 me produjo muchas emociones, pero fue una experiencia realmente increíble. Con cerca de 80% de aguas residuales que se vierten al medio ambiente sin un tratamiento adecuado, esta plataforma es clave para mostrar lo grave que es la situación de escasez de agua en todo el mundo. En Gradiant, nos hemos centrado en cómo la industria puede reducir su huella hídrica; hablar de nuestras tecnologías patentadas en este escenario fue un momento que nunca olvidaré.
Los días 23 y 24 de marzo, participé en debates sobre las tecnologías del riesgo climático y del agua, así como sobre soluciones innovadoras para una economía azul sostenible. Como vicepresidente de Soluciones Digitales de Gradiant, me centro principalmente en cómo nuestras soluciones digitales patentadas SmartOps pueden optimizar y tratar de forma sostenible el agua y las aguas residuales industriales. Al aprovechar la IA para el análisis predictivo, el mantenimiento y el rendimiento, la plataforma SmartOps, cuando se utiliza con nuestras soluciones de ósmosis inversa, permite a las principales marcas del mundo reducir y reutilizar más agua. La ONU invitó a muchos líderes empresariales mundiales a hablar sobre cómo las tecnologías disruptivas pueden tener un efecto a largo plazo sobre la escasez de agua. Cada día, Gradiant ahorra alrededor de 3 millones de hogares medios de agua a través de 600 proyectos en todo el mundo.
Durante mis presentaciones, hablé del papel de la innovación y la tecnología en la realización de acciones sostenibles en materia de agua, así como de la necesidad de catalizar el cambio industrial, el compromiso y la inversión. La Comisión Mundial sobre la Economía del Agua ha pronosticado que en 2030 la demanda mundial de agua superará a la oferta en 40%. Por lo tanto, tenemos que actuar ahora para ayudar a las empresas a aprovechar la tecnología para reducir y reutilizar sus aguas residuales en sus procesos industriales.
En la actualidad, la IA y las tecnologías de aprendizaje automático se están aprovechando para resolver muchos problemas relacionados con el agua, pero tenemos que acelerar su adopción para lograr un impacto significativo. Ha sido alentador ver a las partes interesadas del sector compartir sus iniciativas para lograr una buena economía y gestión del agua. También hice hincapié en la importancia de resolver los problemas del agua con una acción colectiva, ya que los desafíos del agua en todo el mundo están conectados con los alimentos, la energía, el clima y más. Para hacer frente a estos problemas, se requiere un esfuerzo global de todas las industrias que consumen grandes cantidades de agua.
La Conferencia de la ONU sobre el Agua de 2023 ha vuelto a situar el agua en el centro de la agenda mundial, lo que esperamos que suponga un punto de inflexión en la forma en que vemos este flujo de valor fundamental. Salí de la conferencia inspirado por la acción colectiva y el compromiso de todos los participantes. El agua es el recurso más importante que tenemos como personas; solo optimizando su uso, aprovechando la tecnología y siendo conscientes de su valor, podremos realizar cambios sostenibles en las industrias de todo el mundo.